Respuesta de Amelia al rechazo de Mickey Mouse

 Estimado Mickey

    Debo confesarte que me apenó mucho leer tu primera respuesta a mi carta. Realmente estaba confiada de que apoyarías mi proyecto y verías en él algo mágico y especial para mostrarles a los niños del mundo.

    Dado que vos sos para el mundo de la fantasía lo que yo soy para el mundo de la aviación, me veo obligada a escribirte estas líneas para insistirte en considerar el proyecto. Ambos somos dos figuras reconocidas de nuestro ambiente y creo fervientemente en que podemos potenciarnos para lograr el máximo beneficio para los dos. Tenemos mensajes muy fuertes para dar y estoy segura de que esta es la manera correcta.

    En cuanto a lo que mencionas en tu respuesta sobre las niñas que solo quieren ser princesas o pertenecer al mundo de hadas, permitime disentir. Es lógico que si una chica ve únicamente una princesa fantástica a la cual un hada madrina le convierte sus harapos en un magnifico vestido, solo querrá seguir ese ejemplo. Pero, ¿Qué ocurriría si les mostramos que no esta mal querer ser princesa pero que hay muchas cosas más a las que pueden aspirar? ¡y que deben luchar para conseguir sus propósitos!

    Tengo que insistir en que aceptes la oferta de reunirnos cuanto antes en California y discutamos este proyecto. Estoy segura que ambos llegaremos a un buen acuerdo mediante el dialogo discutiendo las oportunidades y las ideas que tengamos. Todos merecemos segundas oportunidades, como tu buen amigo Walt Disney, a quién le confiaron para prestarle dinero y que terminara de crear "Blancanieves y los siete enanitos". Y como sabés, esta fue un éxito, pero no hubiera sido posible si no le hubieran hecho ese préstamo. 

    Sin más, me despido con un afectuoso saludo.

    Amelia Earhart.